Introducción: Celebrada como una de las actividades mas destacadas de la antigüedad, el participar de una carrera continua siendo una figura valida para referirse a la experiencia de la vida de todo cristiano. Veamos que tiene que decirnos esta metáfora en nuestros días.
I. El punto de arranque: nuestra conversión, v. 12.
A. A partir del momento en que nos convertimos comenzamos a correr.
B. Nuestra carrera implica que no somos perfectos, pero que vamos hacia la perfección.
II. La metodología necesaria: evitar toda distracción, vv. 13,14.
II. La metodología necesaria: evitar toda distracción, vv. 13,14.
A. No dejarnos distraer por lo que ya ha sucedido en el pasado en nuestras vidas.
B. Ser perseverantes en nuestro esfuerzo por llegar a la meta.
Conclusión: Cuando el ex-presidente Charter se presento ante el almirante Rickover para solicitar un puesto en el submarino nuclear, este le pregunto por sus notas en la Academia Naval. Carter le contesto con orgullo que habia sido el 59° de 820 estudiantes. Rickover, en vez de felicitarlo. Le pregunto si siempre habia hecho lo mejor. Cuando Carter le contesto que no, Rickover le hizo otra pregunta que quedaría grabada permanentemente en la mente del futuro mandatario: "¿Por que no?" Como cristianos estamos llamados a participar de la carrera espiritual haciendo siempre lo mejor.
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