Amor protector de Dios Judas 20 y 21

Iglesia Roca de Salvación

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Rev. Samuel M González

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Judas 20 y 21

Pero ustedes, queridos hermanos, manténganse firmes en su santísima fe. Oren guiados por el Espíritu Santo. 21Consérvense en el amor de Dios y esperen el día en que nuestro Señor Jesucristo, en su misericordia, nos dará la vida eterna. (Dios habla hoy).

Pero ustedes, queridos hermanos, sigan confiando siempre en Dios. Esa confianza es muy especial. Cuando oren, dejen que el Espíritu Santo les diga lo que deben decir. 21 Confíen todo el tiempo en el amor de Dios, y esperen el día en que nuestro Señor Jesucristo nos dará la vida eterna, pues él también nos ama mucho. (Biblia en lenguaje sencillo).

En los versos. 20 y 21, Judas combina al Padre, Hijo y Espíritu Santo; y también la fe, esperanza y amor. Conservaos no en vuestra propia fuerza, sino "en el amor de Dios," es decir, el amor de Dios hacia vosotros y todos sus hijos creyentes es la única garantía de que sean guardados en seguridad, la necesidad de vigilarse no es suficiente, a menos que Dios en amor nos guarde.
Si UD hubiera nacido judío, no le hubiera parecido extraño estar oyendo continuamente acerca de la ley de Dios, porque diariamente era leída, Como cristiano nacido de nuevo, no le debe parecer extraño tampoco estar oyendo constantemente acerca del amor de Dios, porque el amor es la fuerza central del evangelio, el amor dirige el poder moral y ético de la doctrina cristiana, es la cura del hombre, ahora, el amor del evangelio a diferencia del amor humano se centra en la revelación de Dios padre. La paternidad de Dios fué mostrada en el judaísmo, pero no era una enseñanza prominente, fué presentada en toda su magnitud en el cristianismo, en tiempos patriarcales la paternidad divina era enseñada, era la religión principal de su día, sin embargo gana su completa revelación en el cristianismo, el evangelio es realmente esto_”el poder del amor de Dios en el alma humana”.
El comienzo de la vida cristiana es la revelación al alma humana del amor de Dios, fué necesaria una revelación especial para enseñarle al hombre el amor de Dios, por medios naturales no podemos alcanzar a conocer cuanto nos ama Dios debido a la uniformidad de ese amor, solo la providencia divina, puede revelarnos lo inmensurable de ese amor, el judaísmo no podía revelar ese amor, debido a lo estricto de la ley, tampoco el paganismo podía mostrar el amor de Dios debido a su politeísmo y asociación sensual, la dificultad para recibir conocimiento de ese amor radica en nuestra propia naturaleza, enferma y degradada por el pecado, nuestra conciencia de pecado nos hace pensar que Dios no nos ama, al igual que el niño que comete un error, piensa que el padre no lo ama. El que escondió el talento pensaba que su patrón era cruel. El amor de Dios no es una declaración, el amor de Dios es un sacrificio, es su aproximación a nosotros, lo cual se transforma en un poder que produce cambio en nuestras vidas.
La continuidad en la vida cristiana depende de que nosotros guardemos la confianza de que Dios nos ama, eso solo puede guardarnos en sinceridad, el amor es más exaltante que la ley, mas inexorable que la ley, el amor es el celo que desea no perder ninguna de las bendiciones de Dios, nada nos puede mantener mas puros y humildes que la seguridad de que Dios nos ama. El único esfuerzo que debiéramos hacer constantemente en la vida cristiana, es el de asegurarnos a nosotros mismos que Dios nos ama.¿Como podemos mantenernos en amor? a) acaricie cada pensamiento cariñoso de Dios que pueda ser sugerido en su mente, por el Espíritu Santo b) manténgase vigilante a cualquier oportunidad que se le ofrezca para mantener comunión con Cristo, la amistad necesita comunión c) ande en santidad y rectitud d) Cultive un espíritu de niño, este ejemplo lo puso Cristo, cuando sitúo un niño delante de sus apóstoles.

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