Matrimonio, sexo y familia .Proverbios 5:7-11

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Matrimonio, sexo y la familia

PROVERBIOS 5:7-11

Pues bien, hijo mío, préstame atención y no te apartes de mis palabras. Aléjate de la adúltera; no te acerques a la puerta de su casa, para que no entregues a otros tu vigor, ni tus años a gente cruel; para que no sacies con tu fuerza a gente extraña, ni vayan a dar en casa ajena tus esfuerzos. Porque al final acabarás por llorar, cuando todo tu ser se haya consumido.

Una investigación realizada por W. Bradford Wilcox de la Universidad de Virginia analizó información de tres diferentes encuestas: la General Social Survey, la National Survey of Families and Households, y la National Survey of Family Growth. La investigación también obtuvo información parcial del libro de Wilcox: “Soft Patriarchs, New Men: How Christianity Shapes Fathers and Husbands.”

La conclusión de la investigación fue que “Los hombres religiosos (y sus esposas) disfrutan de matrimonios más felices, tienen menos probabilidad de tener hijos fuera del matrimonio, y tienen más probabilidad de tener un acercamiento padre-hijo más activo y afectivo durante la crianza de los hijos, en comparación con los hombres nominalmente religiosos o seculares,” escribió Wilcox. “Por lo tanto, cualquier esfuerzo por fortalecer los lazos del hombre con sus hijos y familia debe reconocer e incorporar el importante papel que juegan las instituciones religiosas en dirigir el corazón del hombre hacia el hogar.”

La iglesia ha mantenido verdades que son las columnas y baluartes de la familia cristiana.

1. 1ra Verdad Bíblica Génesis 2:17-19. Naturaleza interna del matrimonio y del hogar feliz. Como deben ser las relaciones de pareja. La vida en comunidad refleja también la imagen y semejanza a Dios quien se ha manifestado desde el principio no en soledad sino en trinidad. Dios decide formar la mujer de una parte del hombre, lo hace dormir profundamente. Una de sus costillas (v. 21) significa una porción del medio y del frente del hombre, y no una costilla individual (v. 23). Dios presenta la nueva criatura al hombre quien expresa la naturaleza de la mujer en tres declaraciones: Primera, reconoce la igualdad del nuevo ser. Ella también es humana y de la misma materia del hombre (hueso de mis huesos y carne de mi carne, v. 23). Segunda, Adán le concede identidad propia (mujer, v. 23), aceptando la sexualidad diferente que completa y complementa la humanidad. Esta cualidad hace posible que la mujer sea compañera al hombre (3:12). Tercera, por ser formada del hombre, la mujer es lo más cercano posible al hombre y su más compatible. Con estas declaraciones el hombre expresa su aceptación y su satisfacción completa. La naturaleza de la relación matrimonial según Dios es: Primera, exclusiva y de compromiso social (dejará a su padre y su madre, v. 24). Segunda, monógama, heterosexual y de pacto mutuo (el hombre... se unirá con su mujer, v. 24). Tercera, de complementación mutua (serán una sola carne, v. 24). Cuarta, de libre comunicación e intimidad significante (estaban ambos desnudos, v. 25). Los principios para un hogar feliz son: a) Dejará a su padre y a su madre. Hay una implicación de madurez física y emocional que permite al hombre y a la mujer tomar sus propias decisiones y asumir sus propias responsabilidades. b) Se unirá a su mujer. Por medio de las leyes establecidas y aprobadas por la sociedad darán la formalidad y seriedad a su unión. c) Serán una sola carne. Se amarán mutuamente con tal entrega y dedicación hasta que llegue a confundir sus vidas e intereses en un solo propósito: glorificar a Dios. Tratar de cambiar, aún el orden de estos principios, resulta en una ruptura del plan de Dios y por lo tanto un fracaso para la pareja y para la sociedad.
2. 2da Verdad Bíblica Proverbios 5 15-22. El auténtico placer sexual, rechazo de todo placer sexual ilícito, condenación de lo prostitucion y la poligamia. Este pasaje, indica lo legitimo y bendecido que es la relación sexual entre la pareja legalmente casada. La cisterna y el pozo representan la sexualidad de la mujer o esposa. El imperativo de beber de su propia cisterna y de los raudales de tu propio pozo es una invitación a gozarse en la sexualidad del matrimonio. Es un don de Dios con propósitos maravillosos. El v. 15, por lo tanto, advierte en una forma implícita contra el beber de la cisterna de un hombre ajeno, es decir la mujer de otro hombre. Los versos. 16–18 representan la sexualidad del joven varón. En derramar afuera y por las calles se refiere a mantener relaciones con otra. La imagen de los versos, se refiere a las calles donde se encuentran las prostitutas. Además de las prostitutas de las calles están las puertas de las mujeres de otros hombres, también una trampa fatal. La exhortación es a huir de todas esas insinuaciones sexuales ilícitas. El verso 17 expresa que la sexualidad es algo precioso, no para los que están afuera ni para los extraños. Y el verso 18 declara la sexualidad “guardada” como “bendita”, de la palabra hebrea tan conocida, baruk, es decir “recibir el favor divino en alguna forma que eleva el bienestar de la persona bendecida.” Muchos creen que la Biblia restringe la vida sexual de los creyentes, eso es falso. Dios quiere que sus hijos se deleiten en las relaciones sexuales. Todo lo que Dios hace lo regula, el creo el sexo y lo reguló en el matrimonio. Este pasaje de Proverbios 5 nos enseña: a) La importancia de mantener relaciones exclusivas. 1) Es un privilegio y deber mutuo. 2) Las relaciones exclusivas son para suplir necesidades personales. Somos seres sexuados y hacer el sexo no es pecado, la Biblia solo enfatiza, que tengamos nuestra pareja. b) El privilegio de dar y recibir el amor. Cada persona anhela la relación intima que ofrece el matrimonio, el compartir las intimidades de la vida nos hace mas completos y da sentido de tranquilidad, cuando uno de los cónyuges descuida satisfacer a su pareja, no soló está en pecado, sino que está poniendo al matrimonio en peligro, el sexo no se puede manipular c) La satisfacción sexual en el matrimonio no es pecado y tiene la aprobación y la bendición de Dios. A) Da alegría Verso 18 B) Nos recrea Verso 19